El tercer y cuarto día de Visita Pastoral que realiza Mons. Juan Miguel Castro Rojas en la Parroquia de Santa María de Dota, ha estado marcado por la atención pastoral de fieles en el inicio del fuerte tiempo litúrgico de la Cuaresma.


A nivel pastoral, durante sus homilías, el Obispo recordó que la Cuaresma es “la mejor preparación para vivir la Pascua, porque incluso en los momentos difíciles Dios puede cambiarnos”; y con la lectura del Antiguo Testamento, precisó: “el profeta anunció al pueblo en el nombre de Dios, la necesidad de entrar en un camino de conversión ya que se había alejado de Dios; por tanto, todas las plagas y las situaciones difíciles que vivían eran una invitación para volver la mirada al Señor, siendo necesario amar a Dios, incluso sobre esas situaciones de dificultad”.

También es esta oportunidad, Mons. Castro dedicó parte de su agenda para bendecir las familias, responder sus consultas y compartir en fraternidad, motivando sobre todo a retomar la adoración eucarística e involucrarse en la misión, experiencia que tendrán el próximo domingo. Fruto de estas mismas palabras, se inició una jornada eucarística los días jueves de 1:00 pm a 10:00 pm.

Finalmente, con la Palabra de Dios proclamada, el Obispo recordó que “hay dos caminos: el bien y el mal; optar por el bien nos da la sabiduría para que escojamos el bien, debemos recordar la necesidad de poder caminar hacia Dios, hacia el bien. Por eso, el que quiera ser discípulo hay que trabajar, hay que renunciar para poder ser discípulos, hay que perder la vida por el Evangelio para salvarte, que nada sirve ganar esta vida si se pierde la Vida Eterna”.




